Efeméride 28 July 2020

Acta del traslado de los restos de Sabino Arana realizada por el EBB de EAJ-PNV durante la Guerra Civil

Acta del traslado de los restos de Sabino Arana realizada por el EBB de EAJ-PNV durante la Guerra Civil

Hemos recibido en la sede de Sabino Arana Fundazioa, de manos de Iñaki Anasagasti, una copia de un documento histórico de singular valor para el nacionalismo vasco: “el acta certificatoria de haberse cerrado y soldado a su presencia la urna de zinc que contiene en la actualidad los restos mortales de Sabino de Arana-Goiri, fundador del Partido Nacionalista Vasco”. El acta había sido levantada el 30 de abril de 1937 en la sede del Partido Nacionalista Vasco en Bilbao, tomando parte en la sesión 19 burukides.

 
Previamente, el 27 de abril, a escasas 24 horas del bombardeo de Gernika, se había trasladado al cementerio de Sukarrieta una comisión de miembros del EBB de EAJ-PNV, presidida por Doroteo de Ziaurritz, y de la que formaba parte también Juan de Ajuriagerra. La misión de estos hombres era exhumar y poner a salvo los restos de Sabino Arana, enterrados en el citado cementerio en 1903, ya que el avance franquista hacía temer que la tumba de Sabino fuera profanada.


En primera instancia, los restos de Arana fueron trasladados a Sabin Etxea, donde se introdujeron en una urna de zinc, acto que quedó expresado en el acta que reseñamos. Más tarde, esta caja de zinc fue secretamente depositada en el panteón de la familia de Manuel Sainz de Taramona, en el cementerio de La Herrera, en Zalla. 


No todos los restos de Sabino fueron guardados en Zalla, una parte pequeña de los huesos fueron traslados a la casa natal del beato Michel Garikoitz, en Ibarre (Iparralde). Se hizo creer que a este lugar se habían trasladado todos los restos para mantener más en secreto la inhumación en Zalla. También con esta acción se pretendía evitar que, caso de ser descubiertos los restos de Zalla por los franquistas, todos los restos mortales de Sabino Arana se perdieran para siempre.


El 1 de enero de 1989, todos los restos mortales de Sabino Arana Goiri fueron llevados de nuevo a la tumba original de Sukarrieta, donde reposan en la actualidad.