Efeméride 29 de diciembre de 2020

Identidad y Concierto Económico

En los últimos meses de 1980 se entró en una fase crucial de negociación del Concierto Económico, con un acuerdo final de 29 de diciembre de 1980, aunque por diversas circunstancias no se aprobaría hasta el 13 de mayo de 1981.

Identidad y Concierto Económico

Tras la muerte del dictador Franco comenzó el proceso de Transición al actual sistema de autonomías, que se había plasmado ya  en la Segunda República en los Estatutos de Autonomía de Cataluña y, ya en plena contienda, el del País Vasco y el de Galicia, aunque  también se extendió el proceso a todo el territorio estatal.


De esta manera, Bizkaia y Gipuzkoa recuperaban el Concierto Económico, tras 44 años desde su abolición/derogación en 1937 tras el final de la Guerra Civil en Euskadi. Para Álava, que lo había mantenido, significó un cambio radical en el funcionamiento tradicional de este instrumento de autogobierno por cuanto se incluía al Gobierno Vasco, institución inédita hasta ese momento en el Concierto Económico.


En estos 40 últimos años el Concierto Económico ha marcado la principal diferencia del sistema autonómico vasco respecto al común del Estado de las Autonomías y ha significado una herramienta de primer orden para la gestión pública.


Sin embargo, la aprobación del primer Concierto Económico data de mucho antes, 142 años concretamente, del 28 de febrero de 1878.


Surgió tras la abolición foral, después de la finalización de la II Guerra Carlista, a finales del siglo XIX, como sistema de contribución de las provincias vascas a las finanzas del Reino de España. Este reconocía, a su vez, a las Diputaciones Forales la facultad de recaudar sus propios impuestos a fin de hacer frente a los gastos propios y a los comunes del Estado.


Desde entonces, el Concierto Económico ha sido renovado sucesivamente hasta nuestros días, con la única excepción del período franquista que suspendió su aplicación en Bizkaia y Gipuzkoa hasta su recuperación en 1981. La última renovación tuvo lugar en 2002. Desde esta última renovación, su vigencia es indefinida, aunque está sujeto a posibles actualizaciones.


El Concierto Económico simboliza, pues, la confluencia más evidente de nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro y es una de nuestras señas básicas de identidad. Exponente de nuestra soberanía, sus fundamentos han sido y son continuamente cuestionados por quienes no lo conocen o no lo desean y también por quienes ni aceptan  la singularidad de nuestro autogobierno ni los derechos aparejados a ella.