Nota de prensa • 27 octobre 2020
El mundo coral debe adaptarse a los cambios sociales, culturales y estructurales
• Representantes del movimiento coral vasco destacan la importancia de la memoria para alcanzar nuevos retos en el siglo XXI.
En el marco de las jornadas que anualmente vienen organizando en el campo de la memoria cultural vasca la Fundación Bilbao 700 y Sabino Arana Fundazioa, en esta ocasión se ha analizado el movimiento coralista, “sin duda, una manifestación artística que tiene una historia llena de hitos gloriosos de la que tenemos que tomar todo lo bueno para crear un futuro igual de brillante” tal y como ha asegurado Mireia Zarate, presidenta de Sabino Arana Fundazioa, en la apertura de la jornada. Junto a ella, se encontraba Ana Madariaga, directora-gerente de Bilbao Musika.
Bajo el título “Euskal Abesbatzen Mugimendua: memoria eta erronkak”, en el seminario, conducido por Iñigo Alberdi, gerente de la Sociedad Coral de Bilbao, han participado como ponentes: Pello Leiñena, director de Eresbil -Archivo vasco de la música-; Ana Berrizbeitia, presidenta de la Coral de la UPV-EHU; Valentín Atxotegi, exdirector de la Escuela de Música de Leioa; y David Azurza, compositor, director de coro y coordinador de la Confederación de Coros de Euskal Herria. Asimismo, en el acto también han tomado parte una veintena de representantes del movimiento coral vasco y del mundo de la cultura.
“Hubo una época en la que se decía que tres vascos juntos formaban un orfeón. Cantar en grupo era una manifestación que a los vascos nos “salía de dentro”, era algo natural. Esto no ha desaparecido del todo. Seguimos teniendo grandes coros. El Orfeón Donostiarra, el Pamplonés, el Tolosano y el de la Sociedad Coral de Bilbao son claros ejemplos. Pero…, ya no es lo que era. Las iglesias se han vaciado y cuando acudimos a algún oficio no conocemos las canciones, ya no se alterna como antes en los bares, estamos rodeados de música en todo momento y en todo lugar pero la mayor parte de las veces no es nuestra música, etc. Por no cantar, ya no se canta ni en San Mamés”, ha afirmado Zarate.
Es por ello que, según la directora de Sabino Arana Fundazioa “tenemos que reinventarnos y hacer memoria, porque tenemos un pasado coralista glorioso del que tenemos que tomar todo lo bueno para tener un futuro igual de brillante y que se siga repitiendo la frase de Volataire: “los vascos son un pueblo que canta y baila en los dos lados del Pirineo”.
Por su parte, Ana Madariaga ha destacado que “el progreso, el desarrollo y la transformación de la sociedad no se pueden comprender sin una perspectiva cultural. Y en este sentido, una coral es uno de los máximos exponentes de la riqueza cultural de una comunidad".
“Somos un país que apuesta por la cultura de calidad y por los agentes culturales locales”, ha afirmado. Las corales, al igual que distintos agentes musicales, son un activo fundamental de nuestro país", ha subrayado la directora-gerente de Bilbao Musika.
En su intervención, el director de Eresbil, Pello Leiñena, ha recordado que el proceso de normalización federativa en el ámbito coral vasco tuvo lugar tras la caída del régimen franquista. “A los primeros estatutos presentados en 1979 por la Federación Coral Vizcaína le siguieron otros procesos de normalización institucional en otros territorios”, ha evocado. Anteriormente, en 1969 la celebración del primer Certamen de Masas Corales en Tolosa en 1969, tomando como referentes a la Federación Catalana y la asociación A Coeur Joie, ya había supuesto un punto de encuentro para poner las bases del desarrollo federativo coral vasco.
Leiñena ha puesto también énfasis en otros diferentes hitos como la celebración de la Asamblea constitutiva de la Federación de Euskalerria (15 de enero 1983) que “supuso un punto de inflexión para el desarrollo de actividades como los Cursos de dirección coral, la celebración de encuentros corales, la publicación de la revista Kantuz y la edición de nuevas obras corales por parte de nuestros compositores”.
Por su parte, el coordinador de la Confederación de Coros de Euskal Herria, David Azurza, ha afirmado que el mundo coral se está adaptando a los cambios sociales, culturales y estructurales actuales. “Hay un cambio importante de paradigma en el funcionamiento, objetivos, planteamiento de los coros hoy en día que poco tiene que ver con la manera de ser y trabajar de las agrupaciones corales en los pasados siglos XIX o XX”, ha destacado.
Ana Berrizbeitia, presidenta de la Coral de la UPV-EHU y profesora del Instituto Diocesano de Teología, ha insistido en la necesidad de “aunar esfuerzos para no hundirnos”.
Y finalmente, el exdirector de la Escuela de Música de Leioa y gerente de Leioa Kantika, Valentín Atxotegi, ha realizado un análisis del actual proyecto coral de Leioa y de sus perspectivas de futuro.