Nota de prensa • 8 mai 2021
La pandemia y sus efectos, analizada por expertos de todos los ámbitos en el último número de Hermes
• En la entrevista, el Lehendakari del Gobierno vasco, Iñigo Urkullu, repasa más de un año de COVID-19 con esperanza y voz crítica ante situaciones que se han producido durante este tiempo. “No creo que la clase política hayamos estado a la altura, en general”, confiesa.
La revista de pensamiento e historia Hermes, que edita Sabino Arana Fundazioa, realiza en su próximo número (nª 68) un monográfico sobre un año de pandemia en Euskadi. A lo largo de sus cien páginas recoge las reflexiones de expertos de todos los ámbitos de la sociedad sobre las repercusiones que ha tenido el covid-19 en el País Vasco y cómo nos enfrentamos al futuro cuando la crisis sanitaria pasa por su cuarta ola.
El teletrabajo, la educación on line, las limitaciones a las que se ha enfrentado el autogobierno, la limitación de derechos, el cambio de comercio, la industria, la sanidad pública y privada, la afección en la igualdad de género y en la cultura son algunos de los temas que abordan expertos como Daniel Inerarity, los presidentes de las cámaras de comercio, consejeros del gobierno entre los que se encuentra Gotzone Sagardui, o la propia Idoia Mendia. Profesoras y profesores, educadores… más de veinte colaboraciones que dan una visión profunda y cercana de lo vivido.
El número cuenta además con una entrevista al Lehendakari del Gobierno vasco, Iñigo Urkullu, quien repasa más de un año de pandemia con esperanza y voz crítica ante situaciones que se han producido durante este tiempo. Lamenta no haber tenido las herramientas que le dieran garantías jurídicas para adoptar medidas desde el autogobierno y cree que la pandemia ha traído un riesgo de centralización del Estado. Un año de pandemia es un año de lecciones aprendidas. Del valor de la familia, la relación cercana, la importancia del autogobierno y la cogobernanza, la relación entre lo público y lo privado y el valor de nuestro sistema de salud, Osakidetza. Se siente orgulloso de la gestión de la vacunación porque “todos ibamos a llegar al mismo sitio y al mismo tiempo y hemos demostrado que somos referentes en nuestra estrategia”.
La pandemia ha acelerado la digitalización y la educación on line sin embargo reconoce haber constatado la importancia que en unas edades tiene la educación presencial. Y señala que “formar a las personas no se hace solamente mediante las herramientas digitales. Formar a las personas se hace con el contacto directo personal y con la convivencia”.
De la misma forma que afirma que el teletrabajo necesita de una regulación, una ordenación, unos objetivos y unas herramientas. El lehendakari confiesa un debate suyo interno y personal sobre el comportamiento de la clase política en este tiempo. “No creo que la clase política hayamos estado a la altura, en general”.
Porque en su opinión hay quien ha utilizado la pandemia como herramienta contra el adversario político. Reclama una legislación que le ampare jurídicamente a la hora de tomar medidas dentro del autogobierno sin necesidad del Estado de Alarma, con el que no estuvo ni está de acuerdo. “Me veo en el temor de que en adelante el Lehendakari antes de promulgar un decreto tenga que someterlo a consulta del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco y también a audiencia de otros sectores que se puedan ver afectados por el contenido del decreto” critica.
Su mirada se pierde en el vacío al recordar cada día, cada reunión, en la que se le informaba de los muertos, "Deja mucho poso humano", confiesa. “Duele pensar que la ciencia no ha llegado a tiempo para impedir que el virus pudiera llevarse por delante a una o a cuatro mil personas”. Pero, tiene fe en la capacidad de superación de los problemas como hicieron generaciones anteriores.
La obra gráfica de este número 68 es obra de la artista multidisciplinar Raquel Meyers.